Tesla, Waymo, Nuro, Zoox y otras compañías están adoptando la nueva perspectiva de la inteligencia artificial generativa para avanzar en el desarrollo de la conducción autónoma. Este enfoque está siendo impulsado por la IA de aprendizaje automático y los grandes modelos lingüísticos, similares a ChatGPT, que están revolucionando el software en el sector de los vehículos autónomos.
En eventos como la conferencia GTC de Nvidia, se ha destacado el cambio hacia el uso de tecnologías de inteligencia artificial basadas en el aprendizaje automático, como los modelos Transformer y Large Language Models (LLM). Este cambio ha llevado a una reestructuración en la forma en que se desarrollan los sistemas de conducción autónoma, con un énfasis creciente en los enfoques de extremo a extremo.
El sistema clásico de conducción autónoma, que se divide en módulos de percepción, predicción, planificación y ejecución, está siendo desafiado por los enfoques de extremo a extremo, como el adoptado por Tesla en su sistema de conducción autónoma supervisada. Este nuevo enfoque minimiza la lógica de programación tradicional y se basa en datos de sensores para tomar decisiones de conducción.
Además de Tesla, otras empresas como Wayve, Waabi y Nuro también están explorando enfoques similares. Algunas compañías combinan el uso de modelos de lenguaje transformador con sistemas de conducción de extremo a extremo, mientras que otras adoptan estrategias más tradicionales pero hacen uso de tecnologías avanzadas de inteligencia artificial. A pesar de los avances, persisten desafíos como la "alucinación" de los modelos de lenguaje y la comprensión de las decisiones tomadas por los sistemas de IA, lo que genera discusiones sobre la transparencia y la seguridad en la conducción autónoma.